Quiero creer que todo se trasforma para bien. Es un pensamiento que busco como norte en esta vida tan corta y tan llena de sobresaltos. Vivir es abofetear a la muerte. Así que hay que andar fraguando verdades mientras encontramos siempre otras preguntas... la escritura me da ese camino a la restitución personal recomendada por los psiquiatras. Cuando escribo lo hago con la cabeza y con el corazón, ademas del cuerpo...De eso se trata, de unir en vez de separar... Estamos tratando de ayudar a esta pelota en la que vivimos.
Señora tierra la quiero mucho, hoy 22 de octubre del día lluvioso centroamericano por de mas húmedo y veloz, como las fechas de la temporalidad y la conciencia del deseo de no ser eternos.
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